lunes, 7 de septiembre de 2015

MEJILLONES A LA MARINERA



Se acerca el invierno y con él se acaba el enseñar nuestros cuerpos serranos. Por tanto, podemos permitirnos el lujo de recuperar deportes tan nobles como el de mojar pan en salsas sin reparo ni dar cuenta públicamente. De manera que nada mejor que cocinar unos sencillos Mejillones a la Marinera como se hacen en casa desde hace tiempo y que tanto gustan a mi entregado público.

Esta receta es un cajón de sastre donde encontramos mil y una versiones, todas válidas y sabrosas. Su nombre le viene no de acompañar a pescado y mariscos, si no de salir de las cocinas de los barcos napolitanos en el siglo XVI como método de tener salsa sabrosa que no se estropease con facilidad en una época donde no existían frigoríficos.
                Espero que acaben como yo, querido en casa cuando cocino este plato.
                Un saludo

INGREDIENTES
600g. de mejillones, pimentón ahumado de La Vera, 1 hoja de laurel, sal y pimienta, aceite de oliva, puré de tomate, 2 cebollas, 2 pimientos de freír, dos cucharaditas de azúcar, 5dientes de ajo, un chorrito de Pernod, una cucharadita de harina, hojas de albahaca fresca.

              
  
               En primer lugar, salteamos tres dientes de ajo, cebolla y pimientos. Cuando estén pochados añadimos la harina y el pimentón y cocinamos para que absorba el exceso de aceite de oliva. Incorporamos el tomate triturado junto a dos cucharaditas de azúcar y dejamos cocer unos minutos antes de triturar con una batidora. Una vez terminado este proceso, reservamos la salsa de tomate para añadir finalmente a los mejillones.

                En una cazuela ancha y baja de la que tengamos la tapadera, colocamos dos dientes de ajo que nos quedan, sin pelar y machacados con el canto del cuchillo, y la hoja de laurel a fuego fuerte sin grasa alguna. Cuando tenga temperatura incorporamos los mejillones y sazonamos, tapando unos minutos.

               

               Una vez observemos que empieza a salir agua de los mejillones porque inicia el proceso de cocción, rociamos con un chorrito de Pernod y dejamos que reduzca. Añadimos la salsa de tomate que teníamos reservada y dejamos que se terminen de abrir los mejillones en la salsa, mezclándose así aromas y sabores.


                Para decorar perfumando, trinchamos unas hojas de albahaca fresca sobre la fuente de mejillones y para alucinar mojándolos, podemos preparar unos costrones de pan tostándolos en una sartén junto a orégano y tomillo sin aceite alguno. Añadiendo pimentón ahumado cuando estén listos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario